La comunicación, un elemento más del entrenador para dominar el baloncesto
El entrenador desempaña un papel fundamental dentro y fuera de la cancha. Por eso, es importantísimo que, además de unos amplios conocimientos baloncestísticos, tenga unas habilidades comunicativas que le permitan desenvolverse tanto ante sus jugadores como ante la prensa.
Con los jugadores
Cuando un entrenador transmite a sus jugadores debe estar plenamente convenido de lo que les dice, para lograr así que ellos confíen en los mensajes y crean en él. Debe compartir con ellos sus decisiones, permitiendo que ellos también tengan algo de iniciativa.
Además debe de ser fiable, claro y coherente en sus mensajes y al tratar con los propios jugadores. Tiene que irradiar cordialidad, amistad, aceptación y empatía. Además de ser dinámico, espontáneo y abierto. El entrenador tiene que tener las ideas muy claras para evitar caer en contradicciones que le hagan perder la credibilidad antes sus jugadores o directivos.
Con los medios de comunicación
Al igual que sucede en la comunicación con los jugadores, el entrenador debe mantener un discurso coherente con los medios de comunicación. Muchas veces la propia prensa es la que obliga al entrenador a dar titulares para que aparezca en los medios, ya que decir lo mismo siempre no vende y tienen que salirse del guión marcado para tener repercusión.
Por este motivo y no por otro, se entiende que si un entrenador quiere ganarse el respeto de su equipo, siempre acorde con su autoridad y coherencia, los avisos que pueda dar a los jugadores en el vestuario, tanto consejos como amenazas, queden de puertas para adentro.
Por lo que no tiene ningún sentido que los jugadores que hayan recibido ese mensaje tengan que leer al día siguiente en la prensa o ver en los informativos, las declaraciones de su entrenador, dejándole en evidencia delante de los medios.
¿Qué propósito consigue? Se justifica así sobre las posibles acusaciones sociales de que un jugador, en teoría de los mejores, no estén jugando. O simplemente puede ser para demostrar su autoritarismo dentro del equipo. Sea la razón que sea, en muchos casos, esta circunstancia lo que hace es fragmentar el grupo y crear divisiones, ya que se ha perdido el respeto y la credibilidad por el entrenador.
Pero también puede suceder que el entrenador, antes de salir en los medios, no haya dado ese mensaje al jugador, que se enterará por la prensa. Lo que, a buen seguro, no será del agrado del destinatario y creerá un conflicto mayor en ese caso.
La utilización de los medios como intermediarios no suele resultar, porque, aunque no hay que dudar de la imparcialidad de los periodistas, siempre van a buscar la confrontación y la polémica, lo que va a provocar una situación difícil de digerir en el vestuario. En estos casos, realiza estás declaraciones para justificarse o demostrar su autoritarismo dentro del equipo.
Por tanto, hay que marcar unas directrices que serían aconsejables seguir, por parte del entrenador, cuando se trata de relacionarse con los medios de comunicación. Es importante que no entre en polémicas con los medios, siempre tratando a los periodistas con respeto. No reprender a los medios en su conjunto porque uno le haya criticado. Además, debe de garantizar el acceso a la información a los profesionales, no poniéndoles trabas, y educar a sus jugadores para tener un comportamiento correcto con la prensa.
Por Victor Escandón.
Entrenador superior baloncesto. Periodista
Gabinete comunicación JGBasket
Publicada el: 17 abril 2012 12:01 pm
