En el baloncesto actual, desde hace ya unos años, los equipos tienden a efectuar un baloncesto más dinámico durante los partidos, ahora lo extraño es ver equipos que «matan» claramente el ritmo de los partidos para efectuar un baloncesto más controlado.

Como norma principal en la mayor parte de los equipos, la orden es tratar de forzar el mayor número posible de situaciones de contraataque, los objetivos son múltiples, pero suelen tener siempre los mismos principios básicos: buscar una opción de ventaja numérica que nos permita obtener un lanzamiento relativamente fácil, con lo que nuestros porcentajes aumenten, y evitar que la defensa se pueda organizar, forzando desajustes que podamos atacar con buenas lecturas de juego.

No nos detendremos a enumerar las múltiples consideraciones respecto a la vital importancia que desempeña el contraataque en nuestros ataques, pero la tendencia actual sí nos obliga a centrarnos en la continuación de nuestro contraataque, una vez que éste no puede concluir con éxito en campo ofensivo. Llegar jugando, o transición rápida son los conceptos sobre los cuales los entrenadores trabajan horas y horas en los entrenamientos, sabedores de la importancia que desempeña en el juego ofensivo de sus equipos.

La primera gran reflexión que nos deberíamos plantear es que es una fase del juego que elimina la posibilidad de pausa («matar el juego», «volver a empezar») entre el contraataque, y el juego de sistemas. Esa fase, bien trabajada, nos genera múltiples opciones que con una buena lectura generan situaciones de ventaja, dado que muy pocas defensas son capaces de frenar este tipo situaciones, y estructurarse a nivel colectivo. Esa fluidez, ese dinamismo, favorece además que el estilo de juego sea mucho más vistoso, y atractivo, tanto para los jugadores como para los aficionados. El «pescar» en la desorganización defensiva nos confiere la peligrosidad de no saber realmente qué opción vamos a jugar en ese momento, con lo que podremos dificultar las posibles tareas de Scouting, dejando las finalizaciones más abiertas a la técnica individual, y al talento.

En el baloncesto, la palabra anarquía, no tiene cabida alguna dentro de los esquemas de cualquier entrenador, toda nuestra actividad, debe tener una estructura coherente. Nuestras opciones de llegar jugando no son una excepción, y deben estar basadas también en principios de nuestro juego ofensivo, los jugadores deben estar familiarizados con dichas opciones («Desorden ordenado»). Llegar a determinadas posiciones en el campo favorece que esos principios básicos afloren, facilitando acciones posteriores en el juego ofensivo.

Estas opciones de juego rápido también pueden ser controladas en función del momento del partido, y de las opciones que en él ocurran, dentro de la filosofía que nosotros, los entrenadores, queramos imponer en el equipo. ¿Cuándo jugarlo?, después de rebote, tras canasta, tras tiro libre, etc…el abanico de opciones de abre considerablemente. Otro gran debate que nos debemos plantear, en este caso a la hora de planificar, es si los principios que vamos a emplear serán válidos contra defensas individuales, o zonales. La tendencia actual nos indica que el trabajo tiende a recurrir a principios universales que puedan atacar ambos tipos de defensas.

Uno de los problemas a los que debemos hacer frente es si estructuramos en exceso las opciones de juego, esto puede robotizar al jugador, ¿Buscamos la perfección, o la efectividad?. El limitar el talento individual nos ayuda a tener un mayor control de la posesión, y evitar así pérdidas de balón, sin embargo, el talento, especialmente si nuestros jugadores lo tienen, debe ser explotado por el bien colectivo. Cuando jugamos opciones rápidas, arriesgamos, es inevitable. Nuestro gran trabajo debe ser equilibrar esa balanza entre la coherencia de nuestros principios básicos, y la velocidad de ejecución de los mismos. Cuanto más nos acerquemos al punto de equilibrio nuestra efectividad será mayor.

 

Por Alex Senra del Cerro.
Entrenador superior de baloncesto
Colaborador técnico  JGBasket

Publicada el: 12 Sep de 2012

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