Desde pequeños, los jugadores tienen que ser conscientes de la importancia de estar pendientes del balón en sus labores defensivas. No hace falta hablarles del concepto de ayuda defensiva, pero sí que sepan que, aunque parezca obvio, el jugador con balón es el más peligroso en ese momento y el que más opciones tiene de poder anotar.

Tenemos que ser capaces de que encuentren el equilibrio entre estar constantemente pendientes del balón y no mirarlo, ya que ambas situaciones son igual de contraproducentes. En muchas ocasiones, cuando empiezan a jugar, tenemos jugadores que no paran de perseguir al jugador con balón aunque no sea su atacante y eso desajusta toda la defensa y vuelve loco a los compañeros que no saben a dónde ir.

Además, el saltar al balón sin ningún tipo de criterio hace que pierda de vista a su atacante, pudiendo dejarle en una situación ventajosa para anotar. Pero como decía antes igual de erróneo es saltar continuamente al balón como no verlo en ningún momento y estar pendiente sólo del rival, lo que genera continuas situaciones de 1×1 que si no son defendidas bien acaban en tiros o penetraciones fáciles.

Estamos hablando de minibasket, por lo tanto, lo que tenemos que hacerles ver es que, además de una responsabilidad individual, lo importante es que al equipo no le metan canasta. Al principio, como no tenemos, lógicamente, estructuradas ningún tipo de ayudas, pueden llegar por parte de cualquier jugador, pero tenemos, como entrenadores, que conseguir que interioricen y comuniquen esa ayuda a sus compañeros para que no salten todos al balón. A mí me gusta que hablen y que el jugador que salte grite “¡balón!”. Al principio nos costará conseguirlo y a los jugadores asimilarlo, pero, a la larga, resultará muy eficaz.

Por último, hay entrenadores a los que les gusta que sus jugadores ayuden y recuperen, pero hasta que los jugadores no tengan unas nociones defensivas más amplias y una buena comunicación, no es aconsejable que salten al balón y luego se marchen a recuperar al suyo, ya que podrían volver a dejar solo al jugador con balón y éste tendría vía libre para anotar.

Por lo tanto, cuando nuestros jugadores empiecen en el baloncesto, tenemos que tratar de inculcarles unas nociones defensivas básicas, explicándoles que tienen una responsabilidad individual, pero que lo importante en defensa es que a nuestro equipo no le metan canastas y lograrlo pasa por un trabajo colectivo en el que no puede faltar la comunicación y la solidaridad.

 

Por Víctor Escandón Prada
Periodista deportivo y entrenador superior de baloncesto
Gabinete técnico JGBasket

 

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