No llegaban como favoritos, habían dejado muchas dudas tanto en Liga como en Euroliga, pero Laso ha conseguido inocular un gen competitivo a este grupo que siempre rinde cuando hay un título de por medio. Delante, un Herbalife novato en estas lides, pero que se había plantado en la final por méritos propios y que puso hasta el final en aprietos a los blancos.
Los madridistas saltaron a la pista como acostumbran, con mucha intensidad y con ganas de controlar el ritmo y el marcador desde el inicio. Al Herbalife parecía pesarle la presión de jugar su primera final de la Copa del Rey, aunque ya vivió la experiencia la temporada pasada en la Eurocup (a doble partido), esto es otra historia. Ayón (15 puntos y MVP de la Final) demostró el gran momento de forma por el que atraviesa y superaba con facilidad a Pasecniks –la sorpresa de Aíto en el quinteto–, poniendo la renta en diez puntos (6-16) en un visto y no visto.
Si por algo se ha caracterizado la Copa del Gran Canaria ha sido por remontar sus dos duelos anteriores, en este no iba a ser menos, y los triples de Rabaseda dejaban en el marcador al final del primer cuarto en un 18-24 favorable a los blancos. Aguilar volvía a aparecer como contra el Valencia y las diferencias seguían recortándose. Los grancanarios tuvieron varias opciones de empatar, pero fallaron y el Madrid empezó a dominar el rebote (24 capturas por 15 al descanso) y a correr, recuperando los diez puntos de ventaja. Otra vez, los de Aíto, sabedores de que el partido dura cuarenta minutos y convencidos de sus posibilidades, hicieron la goma y se engancharon al encuentro antes del descanso con un 2+1 de Newley y un triple de Báez para poner el 38-40 en el electrónico y dejando la final en el aire para la segunda mitad.
El tercer cuarto comenzó como terminó el segundo, con un triple de Báez para poner por primera vez por delante a los suyos. El partido entró en una fase de errores, en la que ambos equipos parecían pagar el cansancio acumulado. Los de Laso, en un minuto de lucidez en el tiro, con los triples de Carroll y Maciulis volvían a recuperar el mando en el partido (50-56). Aun así, los madridistas no se encontraban cómodos en ataque, pero aprovechaban los despistes de los insulares para anotar. La primera canasta de Pangos cerraba el cuarto con un apretado 59-62.
Diez minutos por delante y un título en juego. Carroll (13 puntos) y Ayón cogieron las riendas del ataque ante el mal partido de Llull (2 puntos) y, a falta de dos minutos, pusieron a los blancos doce arriba (70-82). Todo parecía sentenciado, pero el Herbalife buscó la heroica y con un parcial de 11-1, gracias a los triples de Rabaseda y los puntos de Oliver –el mejor de los suyos con 16 puntos–, los de Aíto, a falta de seis segundos, se colocaron a dos puntos (81-83), pero no quedaba tiempo y Sergio Rodríguez sentenciaba la final desde el tiro libre.
Herbalife Gran Canaria, 81 (18+20+21+22): Pangos (3 puntos), Newley (8), Salin (3), Báez (8) y Pasecniks (2) –quinteto titular–. También jugaron: Oliver (16), Savané (4), Seeley (9), Rabaseda (14), Omic (8) y Aguilar (6).
Real Madrid, 85 (24+16+22+23): Llull (2 puntos), Carroll (13), Maciulis (11), Reyes (12) y Ayón (15) –quinteto titular–. También jugaron: Rivers (10), Nocioni (7), Doncic (-), Rodríguez (11) y Lima (4).
Por Víctor Escandón Prada
Periodista deportivo y entrenador superior de baloncesto
Gabinete comunicación JGBasket
Foto: ACB Photo