La selección española de baloncesto, tras la celebración de la tercera ventana FIBA y sumar otras dos victorias a su casillero, tiene casi pie y medio en el Mundial de China 2019. Los de Scariolo se impusieron a Eslovenia y Bielorrusia para cerrar la primera fase con un intachable 6-0. Los españoles, clasificados en su grupo junto con Montenegro (3-3) y Eslovenia (2-4), comenzarán en septiembre la segunda fase, en la que se medirán a Turquía (4-2), Letonia (4-2) y Ucrania (3-3) a ida y vuelta. Las tres mejores selecciones irán al Mundial.
Sin jugadores de NBA ni Euroliga parecía un reto complicado, sabedores de que había que medirse a Eslovenia, actual campeona de Europa, pero Scariolo ha sabido desde el primer día formar un bloque sólido y comprometido en el que se mezclaban veteranía y juventud. El técnico español ha hecho debutar a 17 jugadores, destacando Albert Oliver que, a sus 39 años, se ponía por primera vez la camiseta española. La selección ha sabido nutrirse de un grupo de futuras promesas que darán mucho que hablar los próximos años.
Para esta última ventana, podía contar ya con los jugadores de equipos de la NBA y de la Euroliga, pero lejos de volverse loco, Scariolo quiso apostar por la juventud y convocó a los jugadores de Euroliga: Alberto Díaz, Santi Yusta y Alberto Abalde, mientras que de los NBA solo fue Juancho Hernangómez. Bien es cierto que Sergio Llull y Sergio Rodríguez se autodescartaron.
Uno de los mayores logros de esta selección fue la victoria en Liubliana en esta última ventana, no solo por el triunfo sino por cómo se consiguió. Es cierto que a los eslovenos les faltaban sus principales estrellas (Doncic, Dragic, Randolph y Vidmar), pero España realizó un partido soberbio y muy completo desde el minuto uno.
Si hubo un jugador que ha dado un paso al frente en estos encuentros y que destacó por su excelente dirección y por su anotación fue Quino Colom. Un base que se encuentra en su madurez de juego y que queda libre tras finalizar su contrato con el Unics Kazán, un auténtico jugadorazo que confía en poder jugar en Euroliga y si es en España, mejor. Eso sí, si algún equipo que dispute la máxima competición europea le ficha, la selección de las ventanas se quedaría sin poder contar con él. Una lástima, pero estos partidos si para algo han servido, ha sido para revalorizar a los jugadores nacionales.
Por Víctor Escandón Prada
Periodista deportivo y entrenador superior de baloncesto
Gabinete comunicación JGBasket
Foto: FIBA Europe