La selección española cerró la primera jornada de la segunda fase de las ventanas FIBA con el miedo en el cuerpo. Después de perder la imbatibilidad en Ucrania, el Wizink Center tenía que devolver a los de Scariolo a la senda del triunfo y sellar una victoria que les acercase un pasito más al Mundial de China. Al final, aunque con apuros, se ganó y el camino se allana un poco más.
La lista, a pesar de no haber empezado todavía ninguna competición, había contado, como viene siendo la tónica habitual, con muchas bajas. Sin jugadores NBA, algo inexplicable y que vuelve a poner en entredicho la falta de compromiso y con otros, ausentes con la selección, pero disputando amistosos, Scariolo echó mano de los habituales y tiró de la experiencia de Sergio Rodríguez.
El partido de Kiev fue un duelo típico de pretemporada, con los jugadores, después de una larga inactividad, fallones en el tiro y faltos de ritmo. Los españoles, comandados ofensivamente por Quino Colom y el “Chacho”, no supieron ni pudieron parar a Mykhailiuk (22 puntos) ni hacer frente al potente físico ucraniano, notando en exceso la baja de última hora de Fran Vázquez. Una derrota merecida, que servía a España de aviso.
Madrid era el escenario idóneo para enderezar el rumbo e imponerse a Letonia, consolidándose en el liderato de su grupo. Una buena primera parte, con un merecidísimo homenaje a Navarro en el descanso, recibiendo la insignia de oro y brillantes de la FEB y siendo ovacionado por un pabellón que tanto le ha pitado y le ha padecido muchas tardes. Hay que reconocer que la Federación ha estado mucho más hábil que el Barça y ha sabido abordar la situación con rapidez.
El paso por vestuarios sirvió para que los de Scariolo cogiesen fuerzas para dar el impulso definitivo al partido, alcanzando su máxima renta (60-42) al comienzo del tercer cuarto. España sufrió un cortocircuito y dio el partido por ganado antes de tiempo. Los letones empezaron a creérselo y dieron la vuelta al choque a falta de doce segundos (81-82). Ahí apareció, una vez más, Quino Colom para anotar una canasta imposible, dándole un triunfo agónico y convirtiéndose en el mejor del partido con 18 puntos, 4 asistencias y 3 rebotes.
Parece sorprendente que viendo el estado de gracia del base andorrano ningún equipo de Euroliga se haya fijado en él para comandar su proyecto. Tampoco los clubes españoles se han interesado por él, solo Unicaja al principio del verano trató de conocer su situación, pero las negociaciones no fructificaron por su, al parecer, elevado caché y porque Colom quería esperar a ver si le llegaba alguna oferta de algún equipo de Euroliga, que finalmente no se produjo. Un alivio para Scariolo que, viendo el nivel de Quino, podrá contar con él para la próxima ventana.
En noviembre volverán las ventanas, con Scariolo desempeñando su papel de entrenador ayudante en Toronto, mientras se rompe, de nuevo, la cabeza, ya que algunos de los jugadores de estos dos choques estarán disputando la Euroliga, tratando de completar un equipo de garantías con el que enfrentarse a Turquía y Ucrania, tratando de cerrar ya el pase al próximo Mundial.
Por Víctor Escandón Prada
Periodista deportivo y entrenador superior de baloncesto
Gabinete comunicación JGBasket
Foto: FIBA Europe