El Madrid sufrió su segunda derrota consecutiva en una final de Euroliga. Si alguien pensaba que el título estaba hecho después de la exhibición al Barça, nada más lejos de la realidad y más si enfrente estaba David Blatt y su Maccabi. Duro final a una gran temporada en Europa.
Quizá el cartel de favorito fue lo que atenazó al Madrid, que no fue capaz de desarrollar su juego, o quizá fueron los de Tel Aviv los que no les dejaron desarrollarlo. Fuese el motivo que fuese, al final decidieron las individualidades y ahí, los macabeos fueron mejores, sobre todo Hickman y Rice, que ya había metido a su equipo en la final.
En el duelo clásico de Europa (50 enfrentamientos), Blatt tiró balones fuera en la rueda de prensa y quiso meter presión a los blancos diciendo que estaba “preocupado” por el partido del Madrid en semifinales. Una estrategia más del técnico del Maccabi que llevó el choque a su terreno. Arropados por una mayoría de aficionados en las gradas hicieron la goma en la primera mitad, pero, poco a poco, fueron desgastando a los de Laso, rebote a rebote, para llegar al final con el resultado a favor. Pudieron sentenciar antes de la prórroga, pero Rice, que luego en el tiempo extra sí los metería, no acertó con el triple.
El día ya había empezado mal para los madridistas, que veían como su equipo caía derrotado ante el Estrella Roja en la final júnior. Paco Redondo, entrenador blanco, no pudo repetir el título que había conseguido la campaña pasada con el Joventut. Aún así, la temporada de estos jugadores –que echaron de menos a Jonathan Barreiro– es para enmarcar, ya que, tras llevarse el Torneo de L´Hospitalet, lograron alzarse hace unos días con el Campeonato de España.
Nadie se quiso perder la final y uno de los que más atento estuvo fue Orenga. El seleccionador nacional tomó buena nota de lo visto en la cancha y, con la lesión de Ibaka, quién sabe si habrá limado asperezas con Mirotic para tratar de convencerle de cara a la cita mundialista. De lo que no puede tener dudas es del gran momento que atraviesa Felipe Reyes, que, tras un primer tiempo espectacular, fue defenestrado en el banquillo, a pesar de los problemas de su equipo para capturar rebotes.
En el partido por el tercer y cuarto puesto, el Barça se impuso al CSKA. Un duelo totalmente intrascendente que sirvió para que Navarro vaya recuperando sensaciones de cara al tramo final de la ACB y Lampe se reivindique ante su entrenador, demostrándole que puede contar con él en los encuentros decisivos.
En un fin de semana cargado de noticias, Bertomeu anunció el fin de las plazas fijas en Euroliga a partir de la temporada 2015/16. Todavía se desconocen los detalles, pero lo que parece claro es que los equipos de Euroliga descenderán a la Eurocup y de ésta podrán subir a la máxima competición. Una declaración de intenciones y ¿un paso más hacia la Liga Europea?
Se echa el telón de la Euroliga y ya hay que pensar en la temporada que viene. El Madrid tendrá que echar el resto para levantar la ansiada Novena el próximo año. De momento, ya ha ganado la primera batalla, acoger la Final Four.
Por Víctor Escandón Prada
Periodista deportivo y entrenador superior de baloncesto
Analista Euroliga para JGBasket
Foto: Euroleague
